miércoles, 18 de agosto de 2010

Guia para un Ramadan saludable


La salud es la clave de la felicidad y lo que consumimos afecta directamente a nuestra salud. El Islam anima a los musulmanes a que sean conscientes de su salud. El Profeta Muhammad (las bendiciones y la paz de Allah sea sobre él) dijo:

"Aprovecha la buena salud antes de que te aflija una enfermedad".

También alentó a los musulmanes a esforzarse al máximo para tener un estilo de vida saludable que incluye una dieta equilibrada, haciendo ejercicio regularmente; tanto físico como mental y teniendo un equilibrio entre las necesidades materiales y espirituales.

El mes de Ramadán es una gran oportunidad para planear y conseguir un estilo de vida saludable. Con el ayuno, empezamos a aprender cómo controlar nuestros hábitos alimenticios, y cómo mejorar el auto-control y la disciplina. En este mes el estómago tendrá un descanso y el cuerpo sera capaz de romper y expulsar las toxinas acumuladas.

Cambios fisiológicos que se producen durante el ayuno

Para muchas personas la clave de la cuestión en relación con el ayuno es si es bueno o malo para la salud. La respuesta a esto requiere una visión rápida de lo que sucede dentro del cuerpo durante el ayuno: la fisiología del ayuno. Los cambios que ocurren en el cuerpo como respuesta al ayuno dependerán en gran parte de la duración del mismo.

Técnicamente, el cuerpo entra en un estado de ayuno ocho horas o más después de la última comida, cuando termina la absorción de nutrientes de los alimentos en el intestino.

En el estado normal, la glucosa, que se almacena en el hígado y los músculos, es la principal fuente de energía del cuerpo. Durante el ayuno, este almacenamiento de glucosa se utiliza, en primer lugar, para proporcionar energía. Más más, durante el proceso del ayuno, una vez que la glucosa se ha agotado, la grasa se convierte en la próxima fuente de energía. Pequeñas cantidades de glucosa son también "fabricadas" a través de otros mecanismos en el hígado. Sólo con un prolongado ayuno de varios días o semanas, el cuerpo finalmente busca las proteínas para obtener energía.

Esta es la descripción técnica de lo que comúnmente se conoce como "inanición", y es claramente no saludable. El catabolismo es la transformación de moléculas complejas a moléculas simples. Los músculos liberan su proteína para obtener la energía, por eso la gente que sufre de inanición tiene ese aspecto escuálido y débil.

Como el ayuno de Ramadán se extiende desde el amanecer hasta el anochecer, hay una amplio espacio de tiempo para reponer las reservas de energía en las comidas nocturnas. Esto proporciona una suave transición del uso de la glucosa en la grasa como la principal fuente de energía, y evita el catabolismo.

El uso de grasa como energía ayuda a reducir peso, manteniendo los músculos, y, a largo plazo, reduce los niveles de colesterol. Además, la pérdida de peso mejora el control de la diabetes y reduce la presión arterial. También se produce un proceso de desintoxicación, ya que cualquier toxina almacenada en la grasa se disuelve y es eliminada del cuerpo. Después de unos días de ayuno, los niveles más altos de ciertas hormonas aparecen en la sangre (endorfinas), el resultado es estar mas alerta y una sensación general de bienestar mental.

Comer alimentos equilibrados y beber líquidos es importante entre los periodos de ayunos. El riñón es muy eficiente en mantener el agua y las sales del cuerpo, como el sodio y el potasio, sin embargo, estos se pueden perder a través del sudor; para evitar el catabolismo de las proteínas, las comidas deben contener alimentos “energéticos", tales como carbohidratos y algo de grasa. Así que es importante mantener una dieta equilibrada con cantidades adecuadas de nutrientes y sales

Comidas que dañan y comidas que benefician

!El ayuno de Ramadán puede mejorar la salud pero, si la dieta no es correcta, puede empeorarla!

El factor decisivo no es el ayuno en sí mismo, sino más bien lo que se consume en las horas que no se ayuna. Para sacar el máximo provecho del ayuno uno debe prestar atención y reflexión al tipo y cantidad de alimentos que se va a consumir durante este mes bendito.

Espiritualmente hablando, comer demasiado no solo puede dañar al cuerpo sino además interfiere con el crecimiento espiritual. Una dieta, aunque sea menor en cantidad, pero rica en nutrientes te mantendrá sano y activo durante el mes de Ramadan. La dieta debe ser simple y no demasiado diferente de la dieta a la que ya estas acostumbrado.

Los alimentos ricos en carbohidratos de absorción lenta, liberan la energía lentamente durante las horas del ayuno. Estos se encuentran en los cereales y semillas como la cebada, el trigo, la avena, sémola, alubias, lentejas, arroz, harina integral y mijo.

Alimentos ricos en fibra también se digieren lentamente y se encuentran en el salvado, los cereales, harina y granos integrales, las patatas con la piel, verduras tales como las judías verdes y casi todas las frutas especialmente las ciruelas, albaricoques e higos.

Las comidas que se deben evitar son todas aquellas procesadas –de rápida absorción-, que contienen carbohidratos refinados como el azúcar, harina blanca, etc. Y por supuesto comidas ricas en grasas (pasteles, galletas, chocolates y dulces). Además es recomendado evitar bebidas con cafeína como el café, te y colas. (La cafeína es un diurético y estimula la perdida rápida de liquido a través de la orina).

Suhur. La comida antes del amanecer, debe ser sana y moderada, lo justo para alimentarse y proporcionar bastante energía para muchas horas. Así que es particularmente importante incluir en ésta alimentos de digestión lenta.

Iftar. Es la comida que rompe el ayuno (desayuno) al final del día. Ésta debería incluir dátiles, como es tradición del Profeta (las bendiciones y la paz de Allah sea sobre él). Los dátiles proporcionan una refrescante fuente de energía. Los zumos de frutas también tienen un similar efecto revitalizante. Recuerda que la comida, debe ser una comida, no un banquete.

Muchos de los alimentos que se recomiendan, están en el Corán y en la sunna de Muhammad (las bendiciones y la paz de Allah sea sobre él), y corresponden a la guía moderna sobre una dieta sana, ayudando a mantener una dieta equilibrada y sana durante el mes de Ramadan.

Los alimentos más consumidos por el Profeta eran la leche, dátiles, cordero y avena.

Alimentos saludables mencionados en el Corán son frutas, verduras, las aceitunas, cebollas, pepinos, higos, dátiles, uvas y algunas legumbres, como las lentejas.

El Qurán menciona que todo lo que viene del mar está permitido, sin necesidad de un tipo de sacrificio especial, lo que hace fácil la incorporación del pescado en las comidas.

Alimentación y espiritualidad

La alimentación tiene una gran importancia en el Islam. Está asociada con la relación de uno con Dios.

"¡Comed de las cosas buenas de que os hemos proveído, pero no excedáis en ello los límites de la equidad”... (Corán 20:81)

El cuerpo físico es un regalo de Dios; es dado a los humanos como una “amanah” (responsabilidad) para cuidar durante un tiempo fijado. La cantidad y la calidad de la comida influye directamente en el bienestar físico y espiritual.

La comida que se come afecta al comportamiento. Comidas sanas y naturales ayudan a desarrollar un buen carácter. Comer en exceso ha sido siempre mal visto en el Islam, ya que aumenta los apetitos mundanos y puede ser causa de, “apagando” el alma, dificultando el crecimiento espiritual e incrementando las dolencias físicas.

El Profeta Muhammad (las bendiciones y la paz de Allah sean sobre él) dijo en un hadiz:

“Los hijos de Adam no llenan peor un recipiente que sus estómagos. Son suficientes unos bocados para mantener su espalda recta. Si tienen que comer más, entonces que sea un tercio de alimento sólido, un tercio de bebida y un tercio de aire. (Sunan al-Tirmidhî)

El Islam considera la salud y el bienestar como algo más que un cuerpo físicamente sano. El bienestar requiere una fuerte relación con la espiritualidad, un cuerpo físico saludable, felicidad mental, un sentido correcto de la vida y un buen carácter en la relación con los demás.

En el Islam hay una fuerte conexión entre la alimentación y la adoración, y enseña que todas las formas de adoración tienen un propósito profundo que contribuye al bienestar del individuo y la sociedad.

¡Oh hijos de Adán! ¡Embelleced vuestro aspecto para cualquier acto de adoración, y comed y bebed con libertad, pero no derrochéis: en verdad, Él no ama a los derrochadores! (Corán, 7:31)

El Islam favorece el sentido de la responsabilidad en las personas para escoger un estilo de vida sano. El ayuno en el mes de Ramadan nos enseña cómo dirigir y practicar la espiritualidad y no comer en exceso. El aspecto esencial de la espiritualidad en relación con la comida es que seamos agradecidos y estemos contentos con lo que tenemos.

El Profeta (las bendiciones y la paz de Allah sea sobre él) dijo:

“Dios tiene un derecho sobre ti; tu cuerpo tiene un derecho sobre ti....”

Para que haya un equilibrio entre las necesidades del cuerpo físico y el espiritual, se debe, por un lado, consumir un adecuado tipo y cantidad de comida y, por otro, desarrollar buenas relaciones interpersonales.

El Profeta (las bendiciones y la paz de Allah sea sobre él) dijo:

“He sido enviado para perfeccionar el carácter”.

El ayuno en este mes bendito es una oportunidad para hacer cambios significativos en tu estilo de vida.

¿Qué es lo que ganamos con el ayuno?

- El ayuno es un entrenamiento espiritual que tiene beneficios físicos prolongados.

- Una mayor consciencia de Dios

- El ayuno nos ayuda a estar menos preocupados con los deseos y apetitos del cuerpo.

- El corazón y la mente están más libres para reflexionar sobre asuntos espirituales, tales como nuestra relación con Dios y Su creación.

- Nos ayuda a desarrollar una consciencia profunda de Dios –“Taqwa”.

Un estilo de vida saludable

El ayuno ejercita el auto-control, al responder al hambre y la sed desde un nivel mayor de conciencia y disciplina. Durante el ayuno apreciamos mejor el valor de la comida. En el Corán se habla de los “alimentos saludables” como la mejor provisión. Así que ayunar ayuda a a mejorar la salud, al hacer pequeñas pero duraderos cambios en la dieta diaria.

Compasión y caridad

Durante el ayuno debemos pensar en los necesitados, algunos de los cuales incluso están ayunando sin tener apenas unos bocados para romper el ayuno.
El Profeta (las bendiciones y la paz de Allah sean sobre él) describió el mes de Ramadan como “el mes de la Misericordia”. Su compañeros observaron que:

“El Profeta Muhammad (las bendiciones y la paz de Allah sean sobre él) era el mas generoso entre la gente pero era aún más generoso durante el Ramadan...” (Sahih al-Bukhari)

El espíritu comunitario

El Profeta Muhammad (las bendiciones y la paz de Allah sea sobre él) dijo en su discurso sobre Ramadan:

...“Recordad el hambre y la sed del Día del Qiyamah (Juicio) con vuestra hambre y vuestra sed. Ayudad a los necesitados y a los pobres; honrad a vuestros ancianos; amad a los niños; cuidad las relaciones con vuestros familiares; controlad vuestras lenguas; cerrad vuestros ojos a las cosas que no os está permitido ver; cerrad vuestros oídos a lo que no os está permitido oír; mostrad vuestra compasión hacia los huérfanos de otros, para que sea mostrada compasión hacia los vuestros. Arrepentíos ante Allah por vuestras faltas y elevad vuestras manos en du´a (súplica) durante este tiempo, ya que es el mejor y Al-lah mira a sus criaturas con amor, respondiendo a sus peticiones y atendiendo sus necesidades.”

Durante Ramadan los que están ayunando deben tener una mayor preocupación por el bienestar de la comunidad, tanto para los ricos como para los pobres, los sanos y los enfermos, los intelectuales y los trabajadores, los jóvenes y los ancianos.

El espíritu comunitario se incrementa al comenzar y romper el ayunar juntos. Al rezar y profundizar en el significado del Corán juntos.

Está muy recomendado invitar a otros a compartir tu comida y asegurar que no pasen hambre los vecinos.

Un ayuno sin consciencia de su significado profundo es un ayuno sin bendición. La abstención durante largas horas puede ser muy dura, tanto física como espiritualmente. Sin embargo, al final del largo mes de ayuno debemos sentirnos limpios y con un alma renovada.

El Ramadan es un momento ideal para romper malos hábitos, reflexionar sobre nuestra personalidad y mejorar nuestro carácter.

Los que ayunan solo retrasando una comida, sin hacer un esfuerzo por cambiar y mejorar su comportamiento, no pueden esperar tener una conducta diferente durante o después del Ramadán. En muchos sentidos este es un ayuno desperdiciado, como leemos en muchos dichos del Profeta:

“El ayuno no es simplemente abstención de comer y beber, sino también la abstención de discusiones vanas y hablar indecentemente”. (Sahih al-Bukhari)

El ayuno es, por lo tanto, mucho más que renunciar a la comida y bebida y esperar a perder unos kilos. Al ayunar la persona reflexiona, actúa, mejora su carácter y mejora el bienestar de la comunidad.

Algunas preguntas frecuentes

Sobre la cuestión general de la enfermedad y el ayuno hay un ayat en el Corán que claramente explica, que para las personas que estén enfermas o que el ayuno ponga su vida en peligro, están exentos de ayunar. Para compensar estos días deben ayunar más tarde, cuando estén sanos o para los que tienen enfermedades crónicas, deben dar de comer a los pobres. Esta forma de compensación se llama fidyah.

“habréis de ayunar durante un número determinado de días. Pero, si alguno de vosotros está enfermo o de viaje, ayunará igual número de otros días; y en tales casos aquellos que se lo puedan permitir, que alimenten a un pobre como rescate. quien hace un bien mayor del que debe a sí mismo se lo hace; porque ayunar es bueno para vosotros --si supierais.” (Corán, 2:184)

- ¿Los diabéticos están exentos de ayunar?

Partiendo de que la ley Islámica exime a los enfermos de ayunar, cada diabético que desee hacer el Ramadán, debe consultarlo con su endocrino y cada caso debe ser estudiado y asesorado individualmente.

- ¿Pueden ayunar personas con la tensión arterial alta o baja?

Siempre con asesoramiento médico, las personas con un buen control de su tensión alta por alteraciones en su vida y/o medicamentos pueden ayunar. Su medico debería hacer cambios en su medicación para facilitar su administración fuera de las horas del ayuno.

Las personas con la “tensión baja” pero que estén bien y estén sanos pueden ayunar.

Es recomendable una adecuada cantidad de líquidos y sales en su dieta.

- ¿Puede ayunar una embarazada?

Si una mujer embarazada se siente fuerte y lo bastante sana para ayunar, sobre todo en los primeros meses, puede hacerlo. Pero si no se siente lo bastante fuerte, está dispensada de ayunar, recuperando los días posteriormente. Hay evidencias medicas que demuestran que el ayuno no es recomendado para una embarazada.

- ¿Es Ramadán un buen momento para dejar de fumar?

Sí. Cualquier momento es bueno para dejar de fumar, y Ramadán aún más.

- ¿Con cuantos años puede un niño ayunar sin perjudicar su salud?

Es obligatorio comenzar a ayunar después de la pubertad. Ayunar antes de esta edad depende de la salud y voluntad y deso de ayunar que tenga cada niño, pero ayunar antes de los 7 años no es recomendado. Es muy bueno que los niños compartan con los adultos la alegría de romper el ayuno. Como una forma suave de entrenamiento y disciplina, y de que se sienta integrado en el mundo de los adultos, se le puede dejar que ayune unas horas antes de su ruptura.

- ¿Se puede usar un inhalador para el asma?

Los juristas musulmanes aun disputan este tema. Algunos dicen que se puede usar un inhalador porque no es considerado ni comida ni bebida. Otros argumentan que el inhalador tiene pequeñas cantidades de liquido que va hacia los pulmones y así rompe el ayuno. Posiblemente lo primero es lo más más sensato, ya que permite a la persona ayunar, que es abstenerse de comer, beber y mantener relaciones sexuales. En cualquier caso siempre es recomendado consultar con su médico.

- ¿Se puede nadar estando ayunando?

Tomar un baño, ducharse o nadar no tiene ningún efecto sobre el ayuno. Por supuesto, no se debe beber agua durante estas actividades.

- ¿Puede una mujer durante la lactancia ayunar?

No. La ley Islámica exime de ayunar a una mujer en periodo de lactancia. Los días se recuperan cuando deja de dar el pecho o se compensa con el fidyah.

- ¿Puede un ayunante tomar pastillas, ponerse inyecciones o parches?

Tomar pastillas rompe el ayuno. Los inyecciones, los parches, inhaladores, gotas para los oídos o ojos no son comparables a la comida y bebida así que, no rompen el ayuno, aunque, si es posible, es mejor abstenerse de su uso. En cualquier caso, recuerda que según la sharia los enfermos están exentos de ayunar.

- ¿Puede la deshidratacion hacerse tan severa que hay que romper el ayuno?

Sí. Niveles peligrosos de perdida de agua pueden producirse si la persona no se ha hidratado lo suficiente antes de comenzar el ayuno, o debido a una intensa actividad física o temperaturas elevadas.

Si la persona orina muy poco o nada, se siente desorientado y confuso, o se desmaya a causa de la deshidratacion debe romper inmediatamente el ayuno bebiendo líquidos. En el Islam la preservación de la vida está por encima de las prácticas devocionales.

- ¿Quién debe ayunar?

El ayuno es deber de todo musulmán adulto, sano física y mentalmente, residente, bien sea hombre o mujer. En lo que respecta a la mujer, debe estar fuera de la menstruación y del puerperio. Por lo tanto, no debe ayunar el enfermo mental, ni el menor, ni la mujer durante la menstruación o puerperio, así como la embarazada, la mujer que está amamantando que teme por su pequeño, ni los ancianos débiles.

- ¿Hay peligro en ayunar durante verano con los dias largos y altas temperaturas?

Sí. Por ello hay que tener mas cuidado en beber más liquidos y sales antes de comenzar el ayuno. Tambien hay que tener mucho cuidado con los trabajos de mucho esfruezo o a pleno sol durante el ayuno. No hay que poner la salud en peligro.


FUENTE: VIDA HALAL

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